De la ley nadie huye…
Hemos oído decir con singular acierto que somos los artífices de nuestro propio destino, una universalidad que envuelve a cada habitante del planeta. Como hacedores de porvenir que somos, entonces, cada decisión cuenta. Descartando de plano la idea del azar, así como de la buena o mala suerte, inexorable la vida nos ubica de frente[…]